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El León de Barrika asume la tarea de alcanzar el domingo las diez primeras plazas. Foto: @PGATour
Viendo sus primeros hoyos de la jornada del movimiento fuimos muchos los que presagiábamos otra de esas rondas con el sello de Jon Rahm. El vizcaíno, que ya el viernes había hecho méritos para quedarse a rebufo de las diez primeras posiciones de la clasificación en este RBC Heritage, comenzó con un acierto tal el sábado que lo llevó a anotarse tres aciertos en otras tantas banderas y a meterse de lleno en la lucha por las primeras plazas. Sin embargo, este fue un ritmo que no pudo extender demasiado en el tiempo.
Concretamente, fue la cuarta bandera la que cortó de raíz sus progresos. Un doloroso doblebogey tras una salida complicada en la que estuvo a punto de marcharse al agua fue el inicio de un cúmulo de acciones que lo obligaron a patear hasta en tres ocasiones y a anotarse un cinco en este par 3 que pesó mucho en su cartulina. De hecho, y a pesar de los intentos del León de Barrika por rehacerse, no volvió a conseguir un birdie hasta la octava bandera.
Un acierto que, si bien es verdad que lo dejaba todavía con opciones de asaltar las diez primeras posiciones, no fue suficiente. Sobre todo porque en la segunda parte del recorrido el español acabó firmando un birdie y un bogey que no pudieron mejorar ese dos bajo par que tenía en el tanteador y que lo obligó a retrasar su lugar hasta el Top 21. Desde aquí, el golfista de la Armada se queda a tan solo dos impactos de las diez primeras posiciones y, eso sí, a seis golpes de un Matt Fitzpatrick (63 golpes, -14) que este sábado ha vivido un día de campanillas.
El inglés ha presentado una cartulina con seis birdies y un eagle sin errores para adelantar por un golpe a Patrick Cantlay (66 golpes, -13) y hacerse un hueco en el partido estelar del campeonato. Completa el podio Jordan Spieth (66 golpes, -12), quien ha terminado la jornada del movimiento con seis birdies y un bogey.
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