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El vizcaíno se queda sin posibilidad alguna de pelear por el triunfo en casa de Nicklaus. Foto: @EuropeanTour
Definitivamente, esta no va a ser la semana que suponga un punto de inflexión para Jon Rahm (75 golpes, +1), que ha cuajado una de las peores vueltas desde que dio el salto al mundo profesional. El vizcaíno, que arrancaba la jornada con un prometedor dos bajo par que le invitaba a meterle presión a la zona alta, se dio de bruces con la realidad nada más poner un pie este sábado en el Muirfield Village de Ohio y se despide de cualquier posibilidad de acabar en la zona alta -lo que, a la postre, lo colocaría en una situación difícil para defender el número 2 mundial-.
Aunque hablemos de la ronda, propiamente dicha, que ya desde el inicio se tiznó con un Jon que inició su participación por el 10. Y fue aquí, precisamente, donde empezó a cavar un agujero del que no pudo salir durante los 18 hoyos reglamentarios. Primero, tripateando para bogey después de que su golpe de approach se quedara a unos 18 metros para birdie y segundo con un dolorosísimo doblebogey en el par 5 el 11 después de liarse sobremanera tras un segundo golpe que le acabó condenando el resto del hoyo.
Así, el español se plantaba con un tres sobre par después de dos hoyos jugados y con una sensación de que la semana se había acabado para él. Porque aunque Jon lo siguió intentando con un birdie en el 13 después de un gran putt desde más de seis metros y medio, un nuevo doblebogey en el 17 tras visitar dos bunkers de manera consecutiva lo puso todavía más difícil. Rahm arrancaba los segundos nueve hoyos con un +4 bn el día que logró maquillar gracias a dos birdies, pero un nuevo error en el 18 dejó todo en el +1 global que campea en estos momentos en su marcador.
De esta manera, el León de Barrika ocupa uno de los últimos lugares de la clasificación y se sitúa a un mundo de los líderes. En concreto, a 17 golpes de un Justin Thomas (66 golpes, -16) que, 54 hoyos después, sigue sin conocer el error. Además, le ha añadido seis aciertos para situarse dos por encima de un Viktor Hovland (66 golpes, -14) con el que compartirá el último partido del campeonato.
