Ya comentamos hace unas horas que Jon Rahm estaba con el putter echando humo y el comienzo de la ronda del viernes en Texas no hizo más que confirmárnoslo, al menos en esos instantes de la jornada. El León de Barrika, que comenzó su vuelta por el hoyo 1, convirtió en el hoyo 3 un auténtico purazo después de un approach que se había quedado a diez metros de bandera.
El vizcaíno no se lo pensó lo más mínimo. Leyó la caída, se cuadró, disparó y la envió por el centro del agujero para sumar su segundo birdie consecutivo y quedarse cerca de las primeras plazas del Fort Worth en esos momentos.
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