Sensaciones contrapuestas las que nos llevamos tras el punto y final de la primera jornada del Turkish Airlines Open sobre la hierba del Montgomerie Maxx Royal de Antalya. Y es que a pesar de que parte de los nuestros ha arrancado con buen pie este jueves -sobra ver el ejemplo de Jorge Campillo (68 golpes, -4), que sigue con su línea ascendente de juego, o de Adrián Otaegui (69 golpes, -3), no han sido todo buenas noticias en el país otomano. De hecho, son dos nacionales los que cierran la tabla después de que tanto Adri Arnaus (75 golpes, +3) como Álvaro Quirós (76 golpes, +4) se liaran en diversos momentos del día.
Pero empecemos hablando del cacereño, que se ha propuesto pelear por el triunfo en el antepenúltimo evento de la temporada después de un largo viaje que lo condujo desde China rumbo a Turquía. En un día en el que compartía protagonismo con Hatton y Kaymer, el extremeño fue capaz de provocar un enorme terremoto en la tabla cuando, después de su paso por el 10, su cartulina marcaba cinco birdies sin fallos que lo condujeron directamente al podio del evento. La lástima es que su producción ofensiva terminó aquí y un bogey en el 12 lo deslizó al Top 12, aunque con todas las opciones intactas de aspirar a la zona noble.
Misma situación que la vivida por Otaegui, a quien un buen principio de día con cinco aciertos y sólo dos errores en las diez primeras banderas le permitió acercarse a la parte alta de la tabla desde primeras horas. De poco sirvió el bogey en su penúltimo hoyo, pues un birdie final certificó el buen día y le permitió marcharse a Casa Club con un gran tres bajo par. Resultado bajo par que también logró Nacho Elvira (71 golpes, -1) gracias a cuatro birdies y tres bogeys.
No pueden decir lo mismo ni Pablo Larrazábal (72 golpes, Par) ni los mencionados Arnaus y Quirós, quienes tendrán que poner toda la carne en el asador en la segunda ronda si quieren llegar al fin de semana con opciones de pelear por cotas mayores en un evento que dominan momentáneamente Matthias Schwab (65 golpes -7) y el inglés Tom Lewis (65 golpes, -7).