La noticia de la vuelta de la competición no pilló desprevenidos a los jugadores, que cuentan con un nexo directo de información sobre cualquier movimiento que efectúa el PGA Tour en relación a la pandemia. Es por esto que en las últimas horas no han salido muchos en las redes sociales aceptando de buen grado o criticando esta decisión. Es algo que se asume, sin más. Muchos necesitaban un retorno a la rutina, una fecha en el horizonte sobre la que trabajar las próximas semanas. Y el anuncio del mejor circuito del mundo señalando en rojo el mes de junio ha contado con un amplio sector de voces a favor.
Uno de ellos ha sido Brooks Koepka, que se congratula de que los torneos vuelvan a ponerse en juego en menos de ocho semanas. Eso sí, lo que no lleva tan bien es que tenga que hacerse sin público. No porque no entienda la medida -sólo un fanático sería capaz de criticarla en esta situación-, sino porque se va a sentir muy raro jugando un día de torneo sin el trasiego de miles de espectadores recorriendo el campo, tal y como ha afirmado en una reciente intervención en Pardon my Take, un conocido podcast americano de comedia deportiva.
“La energía que aportan los espectadores es algo por lo que nos dedicamos a esto. Además, ellos te dan en muchas ocasiones un extra de motivación que a partir de ahora no vamos a tener. Va a ser horrible”, comentaba el ex número 1 mundial. “Siempre tienes la intención de salir en el último partido del domingo y que todos te aplaudan cuando emboques el putt ganador. Imagínate ahora: haces el golpe para ganar el torneo y nadie aplaudirá, porque no habrá nadie. Sólo tú, tu caddie y el silencio”, argumentó.
Además, pronosticó que sin aficionados las puntuaciones serían sensiblemente más altas en los campeonatos: “De vez en cuando llevamos a cabo algún que otro mal golpe y son los fans los que te ayudan a encontrar dónde se ha ido la bola. Esa ayuda ya no la vamos a tener. Va a haber mucho jugador que empiece a perder bastantes bolas”, vaticinó entre risas el norteamericano. En sólo unas semanas saldremos de dudas.