Los nuestros siguen intentando acercarse a la cabeza del evento, pero si hay alguien que está logrando repeler los ataques que le llegan por cada uno de los cuatro costados eses es el australiano Marc Leishman (64 golpes, -16). El jugador aussie sigue haciendo méritos más que suficientes para adjudicarse el BMW Championship y guardarse una oportunidad de sumar el ansiado botín de diez millones de dólares de la semana que viene y lo cierto es que, de seguir a este ritmo, va camino de establecer una puntuación difícil de olvidar.
Y eso que los nuestros no han estado nada mal, pero es que el oceánico lo ha vuelto a poner todo en cada golpe para lograr la friolera de ocho birdies y solo un bogey… Y gracias. Y es que de estar Leishman algo más acertado en las inmediaciones de green quizá nos hubiésemos quedado ya sin torneo desde hace varias horas. No obstante todavía hay esperanzas para Rafa Cabrera-Bello (71 golpes, -6) y el castellonense Sergio García (68 golpes, -6), quienes van detrás de un lugar entre los 30 primeros de la FedEx para poder viajar a Atlanta en solo unos días.
Quien mejor lo tiene es el segundo, que en estos momentos ocupa el 35º puesto en esta clasificación gracias a los tres birdies de la parte final de su ronda. Sergio vivió un día completamente desacertado en los greenes y solo este arreón final le dan esperanzas de seguir escalando por una tabla en la que ahora mismo ocupa el T22, a dos golpes de lo que ahora mismo necesita para hacer la salida en el East Lake el próximo jueves.
Final radicalmente diferente que el cosechado por el grancanario, al que dos bogeys en las tres últimas banderas le han impedido seguir formando parte del Top 10 del evento y, por ende, estar muy cerca de la proeza. Aun así comparte posición con Sergio y a buen seguro que el sábado intentará dar un golpe sobre la mesa para dejarse una opción de cara al domingo.
Jon Rahm (68 golpes, -5) está muy cerca de sus compatriotas e intentará seguir escalando plazas para seguir entre los cinco primeros de la FedEx y no depender de nadie en el último torneo de esta extraordinaria temporada.