Rory McIlroy, sexto mejor jugador del mundo, no quiso despedir la temporada de vacío y para ello no dudó en apropiarse del Australian Open delante de las mismas narices de Adam Scott.
Este es el swing a cámara ultra super lenta del doble ganador de un Grande capturado durante «The Barclays» del 2012, hace ahora poco más de un año.





