Si desde el PGA Tour quieren cumplir su palabra con todos los torneos que se han visto obligados a suspenderse, tenemos que comunicarles que se van a encontrar con un enemigo inesperado: el tiempo. La falta de fechas en el mundo profesional es más que evidente en un calendario en el que apenas se paran unas pocas semanas en Navidad para que los jugadores puedan estar unos días con sus seres queridos antes de volver a hacer la tournée alrededor del mundo. Es por esto que hay que hacerse a la idea de que algunos torneos, directamente, no van a poder disputarse en este 2020.
Y hablamos sólo de algunos porque hay otros que, ya sea «por lo civil o por lo criminal«, sí que van a jugarse antes de que termine el año -aunque, en la teoría, nos encontremos ya en una nueva temporada siguiendo los estándares clásicos de la gira americana-. Nos referimos a los Majors, esos eventos que acogen a miles de espectadores durante una semana entera en diferentes sedes y que son una enorme fuente de recursos económicos para la la zona que cubre el torneo. De hecho, ya se ha rumoreado que el PGA Championship podría disputarse en agosto si se consigue retrasar una semana el inicio de los PlayOff de la FedEx Cup, pero ¿y el Masters?
A estas alturas nadie tiene ninguna duda de que el Masters va a acabar disputándose tarde o temprano. Augusta, una ciudad de unas 200 mil personas ubicada en el estado de Georgia, respira Golf por los cuatro costados y es un lugar en el que muchos de sus recursos beben del, tradicionalmente, primer Grande del año.
Y es que, además de duplicar el tamaño de la población durante la semana del torneo, se estipula que éste genera un importe estimado de 120 millones de dólares en la economía local. Restaurantes, hoteles, servicios… muchos de ellos se instalaron ex profeso para este evento y la no disputa del mismo podría generar una enorme crisis para una gran cantidad de personas.
Es por eso que muchos ya están especulando con una posible fecha. Sobre todo los hoteles que, basándose en que el Augusta National se habría comunicado con los distritos escolares locales para intentar agregar un descanso en el mes de octubre, han subido los precios de una manera extraordinaria.
Así, mientras que para la próxima semana una habitación en el SpringHill Suites de Augusta puede salir por un precio de 103 dólares la noche, si elegimos el mes de octubre la misma habitación se dispara hasta los 895 dólares. ¿Estamos, pues, ante la prueba definitiva de que el Masters será el último Grande en jugarse en 2020?