Hace solo unas horas el Circuito Estadounidense Femenino (LPGA) bajaba el telón de la temporada 2015 con la celebración del CME Group Tour Championship, un evento que acabó adjudicándose la estadounidense Cristie Kerr y que encumbró a la neozelandesa Lydia Ko como mejor jugadora del planeta en este último año, acumulando unas ganancias de casi tres millones de dólares solo durante este curso.
Unos datos que han sido posibles gracias a la proliferación de nuevos torneos surgidos tras la crisis. Y esto va a más, según palabras del comisionado Mike Whan acerca de los planes para la temporada 2016.
Y es que desde el año 2011, momento en el que más se notó la recesión en el mundo del golf y donde solo se llevaron a cabo 23 eventos oficiales con 40 millones de dólares en premios (la cifra más baja desde 1972), el golf femenino ha ido para arriba.
Entrada de nuevos patrocinadores, mejora en la economía e impacto de este deporte en un continente como el asiático han sido algunos de los factores que han provocado que el 2016 vaya a convertirse en uno de los años con más eventos y con más recompensas repartidas –hasta 34 torneos con 63.1 M$-. Y todo en apenas un lustro.
“Estamos en estos momentos en un punto donde nos sentimos cómodos con el número de eventos que tenemos”, afirmó Whan. “Sin embargo, nos encantaría ir incorporando más torneos en el calendario con el paso del tiempo”, y dio una idea que podría ser tomada en cuenta en un plazo no muy elevado de tiempo. “Nuestra intención es llegar a los amantes del deporte casual, no solo a aquellos que ya están enganchados al golf. Si conseguimos ampliar la cobertura televisiva de los eventos podríamos seguir haciendo crecer el circuito, y con ello los premios”.
La nueva temporada arrancará el 25 de enero en el Purk-Silk Bahamas Classic y concluirá el 20 de noviembre con el CME en Naples (Florida). Y todo ello con unos Juegos Olímpicos de por medio. Esta temporada la falta de cobertura no será una excusa para no ver a las Lydia Ko, Inbee Park, Azahara Muñoz o Carlota Ciganda. Lo que hace cinco años era un panorama sombrío ahora se ha convertido en una gira con un futuro muy halagüeño.