Pablo Larrazábal está siendo una de las estrellas en este Open de España 2016. El catalán que ostenta cuatro títulos en el Circuito Europeo es uno de los poquísimos jugadores que se mantienen bajo par en el exigente Valderrama, recorrido que muchos de los jugadores que toman parte no olvidarán su paso por el mismo.
El barcelonés, firme candidato a la victoria final, realizó una de sus mejores vueltas según él mismo declaró al finalizar la jornada. «Ha sido una jornada soñada, uno de los 3 mejores días de mi carrera, hacer par en estas condiciones es como hacer 7 u 8 bajo en otro campo en un día perfecto. Estoy contento, he fallado un tiro y lo he pagado con creces pero hay que seguir jugando al golf. Después no me he sentido bien y he conseguido terminar con 6 pares que es lo que quería».
El golfista español, quién cumplirá 33 años el próximo 15 de mayo, explicaba la dureza del recorrido gaditano de la siguiente manera: «He ido con -4 y lo normal era terminar con -2, pero los hoyos 1, 2, 3 y 4 están brutales y he hecho +4. Cuando estás en el campo en estas condiciones, no piensas en los resultados».
Larrazábal afrontará el fin de semana con un menos tres en su marcador fruto de los 71 golpes anotados en la segunda jornada y los 68 de la primera. Los últimos nueve hoyos del catalán fueron de ensueño dadas las condiciones meteorológicas existentes donde el viento cobró auténtico protagonismo.
Sus birdies al 11, 12 y al emblemático 17 sin errores en esa segunda parte del campo junto al apuntado en el hoyo 1 anularon por completo el bogey del 2 y el triplebogey del 3 lo que le deja en unas magníficas condiciones para apuntarse su quinto triunfo en el Tour Europeo, siempre, claro está, con el permiso de sus rivales.