Hablábamos hace 24 horas que se está viendo a un nuevo Pablo Larrazábal (67 golpes, -9) en este comienzo de año. Y el barcelonés se ha encargado de confirmarlo con otra gran ronda de Golf sobre la hierba del Al Hamra GC. Si lo logrado por el catalán en las primeras 24 horas de torneo fue una dosis de gran juego, lo conseguido este viernes lo hace entrar en la lucha por la victoria en este The Ras Al Khaimah Classic.
Sobre todo después de lo visto en las cinco primeras banderas, donde Larrazábal llevó a cabo un juego con mucho acierto en el que cuatro birdies le abrieron de par en par las puertas del podio. Poco importó el bogey del 12 -empezó el recorrido por el 10-, pues el acierto en el 18 dejó su tarjeta con un cuatro bajo par momentáneo que terminó por crecer en las nueve banderas finales. En estas, dos aciertos en el 5 y el 8 minimizaron los efectos del bogey en el 2 y le permite colarse en uno de los partidos estelares del sábado.
Y es que la jornada del movimiento le da la bienvenida en una concurrida segunda posición, tres golpes por detrás de un Ryan Fox (69 golpes, -12) que continúa mirando a todos sus rivales por el retrovisor. Aunque el barcelonés no ha sido la única alegría para la Armada en este segundo día de evento. Sobre todo porque los adrianes –Otaegui (68 golpes, -7) y Arnaus (67 golpes, -7)- han bajado de los 70 impactos y se integran en el Top 14 de la prueba.
Jorge Campillo (69 golpes, -4) será el encargado de acompañar a todos ellos a lo largo de los 36 hoyos finales del evento después de ser capaz de anotarse cuatro birdies en las siete últimas banderas.
How it stands with 36 left to play ?#RakGolfClassic
— DP World Tour (@DPWorldTour) February 11, 2022