En más de una ocasión hemos comentado las excentricidades a las que algunas casas de apuestas permiten jugar y ésta no es más que otra de ellas. Y es que, ¿Cómo se quedarían si les dijésemos que ya es posible arriesgar el capital teniendo a Charlie Woods como protagonista? Efectivamente, a pesar de que todavía no sabemos el camino que va a tomar en la vida el hijo de Tiger, su exhibición esta pasada semana en el PNC Championship ha hecho que su nombre se revalorice entre las futuras estrellas de este deporte.
Tanto es así que el sitio web sportsbettingdime dot com ha sacado a la luz esta semana algunos mercados en los que se incluía al jugador de 11 años como posible ganador de algún Major antes de que cumpliera los 25. Si esto sucediera, el apostante que se aventurara a cerrar el acuerdo se llevaría la nada desmerecedora cifra de 825 dólares por cada dólar apostado. Una cifra alta, sí, pero tenemos que tener en cuenta de que estamos hablando de un chaval que ni siquiera tiene claro todavía si quiere seguir los pasos de su progenitor.
“Vaya locura”, podrán pensar -y no seremos nosotros quienes le hagamos cambiar de opinión-. Sin embargo, esta no es la primera vez que salen a la luz este tipo de apuestas que tienen a promesas como grandes protagonistas. De hecho, cuando Rory McIlroy contaba con 15 años y su nombre comenzaba a sonar con fuerza en los círculos golfísticos, algunas bookies británicas aprovecharon para incitar a la gente a apostar si aquel joven jugador norirlandés lograría hacerse con el Open antes de cumplir los 25.
De esta manera Gerry McIlroy, padre de la criatura, y los amigos de éste se aprovecharon de una apuesta que hicieron de 400 libras para embolsarse nada más y nada menos que 200 mil libras al estar la cuota en 500 a 1. Una decisión con algo menos de riesgo, pues por aquel entonces ya se sabía que el europeo tenía muy claro que su meta era el número 1 mundial. Y es que el riesgo va a gusto del consumidor.
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