Igualado. Así es como se presenta el OHL Classic que arrancó hace unas horas en El Camaleón Golf Course de Playa del Carmen (México). Y es que nadie ha podido obtener ventaja tras los primeros 18 hoyos del evento. Hasta 59 jugadores se encuentran en apenas cuatro golpes de distancia y todo apunta a que habrá muchos cambios de aquí hasta el final.
Aunque, de momento, son cuatro los golfistas que se reparten el protagonismo en lo alto de la tabla clasificatoria. Los estadounidenses Justin Leonard, Shawn Stefani y Derek Fathauer y el australiano Aaron Baddeley han pegado primero y se marchan a Casa Club con seis golpes por debajo del par y con la sensación de que van a tener que sudar cada birdie, algo que apenas había podido verse en este inicio de temporada en el PGA Tour.
Estos cuatro jugadores aventajan en un golpe, casualmente, a otro cuarteto, el formado por Michael Thompson, D.J. Trahan, Charles Howell III y Patton Kizzire, que tuvieron que conformarse con entregar una tarjeta de -5 en el día en que Matt Kuchar, principal favorito para la victoria según las casas de apuestas, completó su vuelta con un golpe sobre el par y dejándose todo el trabajo por hacer para la ronda de mañana.
Quienes sí que están haciendo sus deberes son los españoles Jon Rahm y Nacho Elvira, que firmaron una tarjeta de -2 y-1, respectivamente, y se guardan todas las opciones para seguir vivos en la pugna por la victoria de cara al fin de semana.
A pesar de ello, ambos españoles terminaron con sabor agridulce ya que tuvieron que ceder un golpe en su última bandera. Rahm tras fallar un putt relativamente corto en el 9 (salió por el 10) después de una gran recuperación desde el rough, mientras que Elvira tripateó en el 18, segundo hoyo más difícil del recorrido.
Gonzalo Fernández-Castaño no ha podido mantener el nivel mostrado durante la semana pasada en el Sanderson Farm Championship –donde acabó en el T15- y ha realizado una vuelta de 76 golpes, cinco por encima del par –antepenúltima posición-, con lo que lo tendrá muy complicado para pasar el corte durante la ronda del viernes.