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Kevin Na ha sido uno de los hombres destacados tras las primeras horas de juego. Foto: @PGATour
La igualdad ha sido la tónica dominante al final de la primera jornada del QBE Shootout, evento que despide el año en el PGA Tour y que destaca, además de por su originalidad -no hay que olvidar el carácter desenfadado del mismo al tratarse de un campeonato por parejas a 54 hoyos– por la sana lucha que tienen todos los años sus participantes. En esta ocasión son tres los dúos que se mantienen en lo alto de la tabla tras la disputa del scramble de la ronda del viernes.
Kizzire y Harman (59 golpes, -13), McDowell y Grillo (59 golpes, -13) y Na y DeChambeau (59 golpes, -13) es la terna que en estos momentos domina sobre la hierba del Tiburon Golf Club de Florida en un día que, para no perder la costumbre, ha destacado por los numerosos birdies en la práctica totalidad del recorrido estadounidense. Un campo con el que los jugadores apenas sufrieron y en el que las doce parejas se movieron como pez en el agua entre números rojos -cabe comentar que las cuatro últimas parejas empatan con un extraordinario -9, a cuatro de los líderes-.
Tres duetos en lo más alto y, sin embargo, ninguno de ellos repitió fórmula para situarse en lo más arriba de la tabla clasificatoria. Y es que mientras Kizzire y Harman fueron los más pragmáticos al acumular trece aciertos sin errores, McDowell y Grillo fueron los únicos que cometieron un error que disimularon con los doce birdies y el eagle y Na y DeChambeau se anotaron once birdies y un eagle con los que en estos momentos consiguen la vitola de favoritos a 36 hoyos para la finalización del evento.
