Algunos pensarán que las palabras pronunciadas por Wyndham Clark en la tarde del martes en relación con los greenes de Pinehurst eran algo exageradas, pero nada más lejos de la realidad. Y a las pruebas nos remitimos. Solo hay que ver el siguiente vídeo publicado in situ, donde se puede comprobar cómo una bola sin aparente velocidad empieza a tomarla a un ritmo endiablado hasta el punto de desaparecer del green a merced del terreno. Toda una prueba de fuego que los jugadores ya están viviendo en sus carnes.
We often debate speed, how fast is too fast? The US Open sets the bar every year. Hit the wrong spot of the green at Pinehurst Number 2 and end up in the waste area 40+ yards away with the hardest shot in golf. Bring on the carnage! pic.twitter.com/4wDbRyUOZN
— Preserved Links (@preservedlinks) June 11, 2024
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