Después de su exitosa temporada como rookie que lo ha llevado a vencer en el Omega European Masters y en el RSM Classic, además de a hacerse un hueco en el equipo europeo de la Ryder Cup presente en Roma, todos los estamentos del golf mundial tenían claro que la LIV Golf League iba a poner sus ojos sobre él. Y el PGA Tour se echó a temblar, sobre todo después de que se conociera que Jon Rahm iba a tener un equipo potente con golfistas que iban a hacer el trasvase Estados Unidos-Arabia Saudí.
Sin embargo, y pese a todos los rumores generados en las últimas semanas, el deportista sueco ha dicho “no” a los petrodólares e, igual que sucediera con el también escandinavo Viktor Hovland, ha descartado formar parte del circuito por equipos. “Tengo mucha confianza en la decisión que he tomado”; señaló el nórdico en una reciente entrevista concedida a SVT Sport. “Nunca intentaré perseguir el dinero como motivo principal. Yo lo que hago es competir y en este caso creo que he hecho lo correcto”; añadió el deportista de 24 años.
“Quiero jugar contra los mejores porque soy una persona competitiva. Obviamente hay que respetar la decisión que toma cada uno, pero en mi caso no me mueve el dinero. Yo miro el PGA Tour y toda la historia que han generado sus torneos y para mí es suficiente. Eso es todo lo que busco”, sentenció el europeo. De esta manera, son tres los golfistas de alto perfil del PGA Tour que han rechazado recientemente a la gira dirigida por Greg Norman: Hovland; Finau y; ahora, Aberg. Una circunstancia que obliga a los saudíes a redoblar su apuesta si quieren hacerse con los servicios de algún Top mundial.
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