Jon Rahm lo volvió a hacer mostrando la magia que posee en sus muñecas. Ocurría en el par 4 del hoyo 14 de Muirfield (5 de su vuelta) después de que el vizcaíno no cogiera el green con su segundo golpe quedándose la bola hundida en el rough. Fue en ese momento cuando el jugador español abrió la cara del palo para jugar un golpe de forma sutil para enviar la pelota al hoyo y anotar su primer birdie de la semana.