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El golfista vasco comienza en Francia con un gran resultado para situarse segundo. Foto: @EuropeanTour
París se ha convertido esta semana en el centro mundial del deporte. Eurocopa en fútbol, el Tour en ciclismo y, por si fuera poco, el centenario del Open de Francia en el espectacular Le Golf National -sede en 2018 de la Ryder Cup-, han tomado las calles y los complejos deportivos del país vecino. Y, aunque en fútbol no se dio todo lo bien que nos hubiese gustado, en lo relativo al golf los nuestros han arrancado como un auténtico torbellino. Entre todos ellos destaca Adrián Otaegui (-4), quien se ha colocado segundo tras los primeros 18 hoyos después haber protagonizado una vuelta inmaculada en el día.
El donostiarra fue uno de los últimos jugadores en saltar a la hierba, pero eso no le impidió hacer una de las mejores vueltas gracias a sus cuatro birdies sin fallo en virtud de una segunda parte del recorrido envidiable –no en vano fue aquí donde consiguió tres de de sus cuatro “rojos” en su cartulina- que le han permitido igualar en el T2 con jugadores de la talla de Thomas Pieters (-4), Bernd Wiesberger (-4) y Thongchai Jaidee (-4), a solo un golpe del danés Lucas Bjerregaard (-5), líder del evento.
El otro jugador nacional en finalizar la vuelta en números en negativo ha sido Eduardo de la Riva (-1) al que, tras un comienzo prometedor con cuatro birdies y un bogey en sus diez primeros hoyos, le pesó en exceso el bogey y el doblebogey consecutivos en el 12 y el 13, que solo pudo arreglar con un nuevo birdie en el 15. De esta manera, el jugador barcelonés se coloca en el T18, a solo un impacto del Top 10 y con pie y medio de cara al fin de semana.
No pueden decir lo mismo Nacho Elvira (+1), Rafa Cabrera-Bello (+2), Jorge Campillo (+2) y el andaluz Álvaro Quirós (+3), que en estos momentos se encuentran en el límite del corte y todavía tendrán que luchar mañana para ser parte de la nómina de golfistas que pugnarán por el torneo.
Algo más complicado lo tendrán Borja Virto (+5), Alejandro Cañizares (+6) y Pablo Larrazábal (+6), a los que solo una gran vuelta por debajo del par del campo el viernes les permitirá seguir con vida en la ciudad de la luz.
A destacar también el tropezón de Danny Willett (+4) y de Martin Kaymer (+3), que no se han encontrado cómodos en ningún momento y mañana tendrán 18 hoyos a vida o muerte por conservar su presencia en el torneo.
