Grandísima jornada dominical la que llevó a cabo Phil Mickelson sobre la hierba de Pebble Beach. Y es que el golfista estadounidense se aprovechó de las condiciones del campo para sacar a relucir su tremendo juego con los hierros. La más clara muestra la vimos en la novena bandera, donde con un hierro 8 el genio de San Diego fue capaz de dejarse una oportunidad magnífica de convertir el birdie y poner tierra de por medio en lo alto de la clasificación.