Miguel Ángel Jiménez ha comenzado con una vuelta bajo par en el Mitsubishi Electric Classic, evento que ya ganó en 2014 en la que suponía su primera victoria en el Champions Tour cuando el torneo se denominaba Greater Gwinnett Championship. Una primera ronda en la que anotaba 70 golpes (-2) en la que se podía leer un eagle, dos birdies y otros tantos bogeys.
Un menos dos que deja al español en la decimoquinta plaza a un solo golpe del Top 10 pero a cinco de una cabeza que comparten los estadounidenses Ken Duke y David Toms. Cierra el podio el también estadounidense Steve Flesch con -5. Y todo ello en un día en el que se permitió levantar, limpiar y colocar la bola en calle debido a la lluvia caída en el TPC Sugarloaf.
Por su parte, José María Olazábal quién también toma parte en el evento se marchaba a la Casa Club con una cartulina de 75 golpes (+3), uno menos que Bernhard Langer que con 76 se iba hasta el puesto 64, seis por detrás del jugador vasco.
Jiménez tiene dos objetivos esta semana, ganar y recuperar el número uno de la Orden de Mérito, aunque el primero le llevaría irremediablemente al segundo ya que la diferencia con Steven Alker, quién no juega esta semana, es de casi 250.000 dólares y el premio al campeón de 270.000.
One shy of tying the @MEClassicGolf record.@DukePGA takes control in Round 1. pic.twitter.com/l3kSowPizX
— PGA TOUR Champions (@ChampionsTour) May 6, 2022