Todavía con el regusto amargo de la jornada del domingo en el Invesco QQQ Championship, Miguel Ángel Jiménez afronta la Charles Schwab Cup -último evento de la temporada en el Champions Tour que tendrá lugar del 8 al 11 de noviembre sobre la hierba del Phoenix Country Club– con las opciones intactas de proclamarse campeón de la Orden de Mérito en una temporada que le ha visto levantar los dos primeros Grandes de su carrera. Se han complicado algo más las cosas que hace siete días, eso es evidente, pero nada que un reparador triunfo en Arizona no solucione.
Y es que, si bien es cierto que el triunfo en el Invesco hubiese dado un salto cualitativo a sus opciones al depender de sí mismo, las cosas no se han torcido tanto como para hacer ningún drama. El de Churriana continúa segundo en la lista de ganancias, eso sí, a 252.436 dólares de un Berhard Langer que puede estar contando las horas para seguir aumentando su leyenda en el circuito sénior. Al alemán le basta con quedar segundo en solitario o incluso empatado con un jugador para terminar un año más en lo más alto y hacerse por séptima vez consecutiva con este galardón.
Esto significaría que al Pisha no le quedaría otra que conseguir el triunfo en el último evento del curso. Aunque no es la única opción. Y es que conforme el centroeuropeo fuera perdiendo fuelle en la Charles Schwab Cup, las posibilidades del español aumentarían exponencialmente. Ahora bien, para ello el alemán tendría que quedar en la parte baja de un campeonato en el que, recordemos, solo participan 36 jugadores. Una tarea nada fácil una vez visto que el nivel de Langer no va a bajar un ápice. Los otros jugadores que también pueden todavía aspirar a liderar la orden de mérito son Jerry Kelly, Scott McCarron y Scott Parel y David Toms, aunque deberían darse un cúmulo de carambolas más propias del snooker.