A pesar de todo el trabajo llevado a cabo durante la semana, la memoria colectiva termina por asociar las victorias a un golpe concreto realizado durante la disputa de la última jornada. Esto mismo le sucedió al vigente campeón del trofeo Wanamaker, Collin Morikawa, que con el paso de los años será conocido por su impresionante golpe de salida en el par 4 del hoyo 16 que le dejó a sólo un par de metros la oportunidad de lograr un eagle con el que dejar vista para sentencia la primera gran victoria de toda su carrera. Un golpe que tardará mucho tiempo en olvidar y que le permitió alcanzar la gloria.
This eagle from Morikawa is a thing of beauty.?
He leads the #PGAChamp by 2. pic.twitter.com/N1QuOLGmRW
— PGA Championship (@PGAChampionship) August 10, 2020