Pocas alegrías de momento para la Armada femenina en el Marathon Classic del LPGA. Y es que de las tres representantes que iniciaron la competición el jueves solo Belén Mozo (69 golpes, -1) será de la partida durante el fin de semana después de haber vencido al Highlands Meadows GC de Sylvania (Ohio) y quedarse un impacto por encima del corte. Y gracias. Porque a la gaditana, pese a comenzar con un birdie sin errores los nueve primeros hoyos, dos bogeys en la parte final de su vuelta a punto estuvieron de costarle muy caros.
De hecho, la jugadora andaluza se vio obligada a embocar un putt en el 9 si no quería ver cómo se deslizaba por debajo del corte. Lo consiguió y estará presente el sábado en la jornada del movimiento, a diez impactos de la estadounidense Gerina Piller (68 golpes, -11) y a nueve de un interesante grupo perseguidor conformado por las estadounidenses Nelly Korda (64 golpes, -10) y Lexi Thompson (65 golpes, -10) y las asiáticas In-Kyung Kim (67 golpes, -10) y Peiyun Chien (68 golpes, -10).
No pueden decir lo mismo las otras dos representantes de la rojigualda que se presentaron en este torneo. Hablamos de la malagueña Azahara Muñoz (70 golpes, +2) y de la gaditana María Parra (75 golpes, +9). La primera de ellas reaccionó tarde, pues en los primeros nueve hoyos tan solo pudo conseguir un bogey y ocho pares. Ni tan siquiera los dos birdies en el 15 y el 17 le permitieron pasar el corte, pues el final de ronda vivido el viernes la retrasó bastante.
Situación similar la de María Parra, que volvía a comenzar la ronda desconcentrada y dos bogeys seguidos en el 4 y el 5 la despidieron del evento. Algo que confirmaron posteriormente el doblebogey del 15 y el bogey del 18.