Poco a poco el mundo del deporte va recuperando la normalidad que perdió en aquel lejano mes de marzo y ya son muchos los que piden a gritos volver a los campos. Ya sean los equipos de fútbol, los campeonatos de tenis o las grandes giras del Golf, son numerosas las entidades que reclaman que, con el paso a la nueva normalidad, los aficionados puedan volver a asistir a los recintos deportivos de medio mundo. Después de todo, los fans proporcionan un generoso aporte a las arcas de cualquier disciplina y su ausencia va a debilitar muchos presupuestos.
Es por esto que muchas asociaciones pelearon -y finalmente acabaron consiguiendo- que el gobernador de Ohio, Mike DeWine, permitiera que los fans pudieran tener cabida en los eventos a los que va a hacer frente el estado este verano. Sin ir más lejos, Muifield Village será testigo a mediados del próximo mes de julio de la disputa del Memorial Tournament, el segundo de los dos eventos que recibirá el campo de manera consecutiva. Sin embargo, cuando el político republicano dio a conocer la noticia a través de las redes sociales, no supimos con exactitud dónde iba a estar el tope de aficionados que iban a poder acceder al recinto, algo que hemos conocido en las últimas horas.
Y es que, según informes publicados por el Columbus Dispatch, el torneo espera permitir hasta ocho mil espectadores simultáneos durante cada uno de los días en los que el campeonato tenga lugar, lo que supuestamente equivaldría al 20 por ciento de la capacidad teórica de Muirfield Village. Eso sí, nada será igual que ante. Pues, además de la eliminación de las gradas, cada hoyo tendrá designados lugares donde sentarse o pararse a disfrutar de la acción, cada una de ellas delimitada para un cierto número de espectadores, que deberán usar mascarillas en todo momento y deberán permitir que le tomen la temperatura a la entrada.
Unas prácticas que tendrán tiempo de probar sin público una semana antes en el torneo que va a tomar el relevo del John Deere que, como ya hemos comentado, no se celebrará por la prohibición de Illinois de permitir esto mismo que va a llevar a cabo Ohio.