Tras una temporada llena de torneos llegamos a los últimos cartuchos para muchas jugadoras que buscan renovar los derechos de juego para el próximo curso. El Indy Women in Tech Championship, sobre la hierba del Brickyard Crossing Golf Club de Indianápolis, está siendo testigo de cómo Belén Mozo (71 golpes, -1) y María Parra (77 golpes, +5) apuran sus últimas opciones de seguir el año que viene en la LPGA y, de momento, pintan bastos para la segunda de las gaditanas, que tendrá que realizar un milagro para aumentar sus prestaciones de cara al viernes.
Más que nada porque la joven golfista española, que necesitaba un gran comienzo sobre el cimentar sus ilusiones en este evento a tres rondas, tan solo pudo sumar un birdie. Fue en el 14, su quinta bandera del día, que sirvió para contrarrestar el bogey de su segundo hoyo. Lástima que para los otros cinco bogeys –tres de ellos seguidos- no tuviera fórmula para arreglarlos, lo que la conduce al T137, casi al fondo de la tabla.
Algo mejor le fueron las cosas a Mozo, a la que su montaña rusa particular con cinco birdies y cuatro bogeys le ha permitido entregar una cartulina en negativo y encarar la segunda jornada desde el T54, con grandes opciones de poder acceder con garantías al sábado.
Aunque sin lugar a dudas las integrantes de la Armada que mejor vuelta realizaron fueron Beatriz Recari (69 golpes, -3) y Azahara Muñoz (69 golpes, -3), que forman parte del Top 25 del evento gracias a dos vueltas con tres golpes por debajo del par del campo. Especialmente meritoria fue la conseguida por la jugadora malagueña, que pasó de arrancar con tres bogeys en sus ocho primeras banderas a acumular seis en las diez restantes para quedarse a seis impactos de Lexi Thompson (63 golpes, -9), primera líder del torneo.