El destino y el golf tienen esas cosas; cuando menos te lo esperas te dan una agradable sorpresa, y ese ha sido el caso del jugador leridano Gerard Piris. Llegaba a Ciudad Real sin muchas expectativas y con la ilusión de pasar el corte en el este primer torneo del Seve Ballesteros PGA Tour 2018 que se ha disputado en el Club de Golf Ciudad Real, un campo-escuela de 9 hoyos a ocho kilómetros de la capital manchega.
“Llevaba un tiempo jugando sin sensaciones, sin encontrar mi juego ni a mi mismo; estuve incluso pensando en dejar los palos. Cuando salió la idea de este circuito, sin dude me apunté; quería probarme a mí mismo. No conocía Ciudad Real ni el campo y la verdad es que me voy encantando: No sólo por la victoria si no por todo: el ambiente, la gente, la ruta gastronómica que hicimos el otro día. ¡Y además con una victoria. Estoy es una nube!”, comentaba el jugador catalán, que se embolso un cheque de unos 6.000 euros.
Y no es para menos, porque esta es una victoria muy especial para el jugador catalán que estrena el Circuito nacional y se lleva además el récord del campo con 54 golpes. “El récord del campo ya no me lo quita nadie, al menos esta semana, estrenar el Circuito que lleva el nombre de Seve tampoco –bromeó Gerard-. Hablando el serio, estoy súper agradecido porque sé que hay muchos esfuerzos detrás de este circuito, estamos en tiempo complicados, y empezar por aquí es un gran paso para todos”.
Fue una victoria trabajada la de Gerard, que partía en esta última jornada desde atrás, con -7, a cuatro golpes de los líderes del viernes Alejandro Esmatges y Jordi García, pero el catalán empezó muy enchufado, con dos birdies a los primeros hoyos y tres más para acabar los primeros nueve; y en los hoyos de vuelta birdie al 10 y un magnífico eagle al 12, para terminar con tres birdies más en los últimos cuatro hoyos. El sol brillaba en Ciudad Real así como el juego de Gerard al que sólo hubo que poner una pega, el bogey del hoyo 14.
“Sin duda esta victoria me da mucho ánimo para jugar todo el Seve Ballesteros PGA Tour 2018. Es increíble como te puede cambiar la vida en un momento”, comentaba Piris.
Si espectacular fue la remontada de Gerard, no menos excepcional fue la del inglés Jordan Gibb, que hoy salía al campo con -6 y con una tarjeta inmaculada de 55 golpes, nueve birdies, subía desde el puesto 15 a la segunda posición del torneo. Gibb le había arrebatado el récord de campo que el madrileño Carlos Balmaseda establecía el viernes. “Seguro que me va a durar veinte minutos”, comentó el inglés afincado en España. Y razón no le faltó.
Jordi García, que salía de colider este sábado, no tuvo su día. El castellonense tuvo tres aciertos en los primeros nueve, a los que sumó uno más en el 15, y con tres hoyos por delante para presionar a Piris, llegó el bogey del 17 que ya le alejaba definitivamente de la victoria. Una jornada similar tuvo el otro líder de viernes, Alejandro Esmatges, que entre birdies y bogeys sólo pudo restarle una al campo con el birdie final del 18.
Buena actuación de Javier Ballesteros, hijo mayor de Severiano, y Miguel Ángel Jiménez Bravo, hijo del veterano jugador malagueño, que terminaron en undécima posición con -10. La próxima cita del Seve Ballesteros PGA Tour 2018 será en julio, en Madrid.
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