Si ya es complicado golpear la bola cuando se encuentra dentro del agua, imagínense ejecutar el golpe mientras esta se mueve a causa del oleaje motivado por el viento. Pues bien, esto fue lo que hizo el japonés Hideki Matsuyama en el temido Blue Monster (hoyo 18) tras enviar la pelota al agua desde el tee. El nipón se descalzó, se arremangó los pantalones y….
It’s not easy to hit a golf ball that’s moving.
But this was about as good as it gets. #QuickHits https://t.co/HKiGqe24HO
— PGA TOUR (@PGATOUR) 5 de marzo de 2016





