
José Mari Olazábal se estrelló en la segunda ronda, como tantos otros (Ángel Cabrera o Graeme McDowell), pero se estrelló. El golfista guipuzcoano se fue con 81 golpes en la tarjeta (+11), mejor que la que él mismo entregó el año pasado en la segunda ronda del PGA Championahip (86 golpes), pero con idéntico global (+16) para abandonar este segundo torneo de Grand Slam del año.
Olazábal, de 47 años y que logró el pasaporte para Merion en una de las previas que se disputó en Inglaterra, se cayó con todo el equipo en la segunda ronda: cuatro doble ‘bogeys’, cinco ‘bogeys’ y dos ‘birdies’. Hecatombe que propicia Merion, que parecía un campo chiquitín y manejable.





