Si hay alguien en el mundo del Golf en estos momentos que rebose felicidad por los cuatro costados ese es Francesco Molinari. Pero Pello Iguarán, su caddie, no debe andar muy lejos. Y es que el español ha trabajado muy duro para llegar hasta aquí y este domingo ha querido compartir con los medios de comunicación nacionales desplazados a Carnoustie sus sensaciones tras el triunfo del transalpino en el que ya es uno de los grandes momentos de su carrera. Y ahí estaba Chiki Trillo, enviada especial de OpenGolf al complejo escocés, para recoger la nota de color española en el torneo.
Un evento en el que la estrategia ha sido clave en todo momento y que ha ido cambiando a diario a medida que lo hacía el campo. “Lo único que teníamos claro es que había que evitar los bunkers. Había que quedarse muy muy corto o pasarlos y este domingo el viento ha hecho que nos inclinásemos por la primera opción”, señaló Pello. “Esto ha provocado que se hiciera tan difícil generar oportunidades claras de birdie, pues teníamos que jugar con hierros largos para llegar a bandera y dejarla cerca era prácticamente imposible”, continuó.
Esto provocó que los pares se fueran sucediendo en el día hasta la llegada del 14. Un hecho que provocó que a Pello le viniera a la mente la imagen de Faldo en 1987, cuando ganó con dos últimas rondas con pares: “Ha habido un momento en que he pensado que podía hacer 18 pares. Pero la duda se ha despejado tras jugar el 12 y el 13. Ahí ha estado la clave de la victoria, después de salvar el par con sendos putts de dos metros y medio y tres metros, respectivamente. La consistencia en el juego ha sido importante, pero el approach y el putt hoy han sido determinantes”, afirmó.
Un hecho que ha servido para celebrar la victoria en el puttin green: “Lo cierto es que tras ver cómo Schauffele fallaba el putt en el 17 y que Francesco tenía muchas posibilidades de ganar ha optado por irse fuera y practicar, por si acado. Afortunadamente no le ha hecho falta”, sentenció el vasco.