Las cuantiosas lluvias caídas en la tarde del domingo sobre Pebble Beach nos han privado de contar a estas horas con un campeón en el torneo que se disputa sobre suelo californiano. Ahora bien, a solo dos hoyos para la finalización del evento muy mal se le tendría que dar a Phil Mickelson (Hoyo 16, -18) para no sumar el 50º triunfo en su carrera. Y es que el genio de San Diego se aprovechó del inoportuno resbalón de Paul Casey (Hoyo 15, -15) para adelantarlo por la derecha y contar a estas horas con tres golpes de ventaja sobre el británico.
El estadounidense, como lleva demostrando desde comienzos de la semana, fue todo un martillo pilón con su juego con los hierros, lo que le permitió subsanar los ya concurridos errores desde la salida -tan solo cogió un 46 por ciento de calles-. Además, Lefty contó con el putter como uno de sus grandes aliados, lo que le permitió sumar hasta seis birdies sin errores para situarse al frente de la clasificación con tres impactos de ventaja sobre el mencionado Casey y sobre su compatriota Scott Stallings (66 golpes, -15), que sí que pudo finalizar los 18 hoyos de juego.
El que también finalizó sus 72 hoyos fue Rafa Cabrera-Bello (74 golpes, -7), que finalmente se deslizó hasta el Top 22 después de un día en el que tuvo muchas sensaciones enfrentadas Y es que el grancanario pasó de unos seis primeros hoyos en los que logró cuatro birdies a unas doce banderas siguientes en las que los errores en forma de doblebogey aparecieron por triplicado para restarle posibilidades de retener el podio que con tanto esfuerzo había logrado.
Así pues, se nos avecina un lunes atípico con, al menos, 40 minutos de juego que arrancará a las 11 de la mañana hora local –seis de la tarde en la España peninsular- y que estará predestinado a ofrecernos casi con toda probabilidad una victoria de Mickelson.