Como sabrán, desde hace un par de meses el histórico Bob Hope Classic del PGA Tour adquirió el nombre del American Express a partir de este curso. Aunque ya avisaron por aquel entonces que no iba a ser la única novedad con respecto a años pasados. Y hace sólo unas horas hemos averiguado el por qué después de que se anunciara que Phil Mickelson pasa de ser el embajador del torneo al anfitrión oficial a partir de 2020. Después de todo, el deportista de 49 años ha ganado el evento en dos ocasiones y posee una casa en el Madison Club de La Quinta.
“Este lugar siempre ha sido una parte muy importante en mi vida. Aquí he llegado a jugar hasta torneos juveniles”, comentó Lefty al Desert Sun. “Siempre me ha apasionado venir y me encanta el evento. Pero más allá de eso, este campeonato ha significado mucho históricamente a lo largo de los años y quiero recuperar la visión que en su día tuvo Bob Hope”, añadió. Y para ayudarle a construir un field bien fuerte, la organización ha inyectado una buena suma de dinero que va a permitir que una bolsa de premios de 6,7 millones de dólares, 800 mil dólares más que el curso anterior.
“Mi papel aquí ha sido analizar cómo está el torneo y dar a conocer las razones por las que este evento es la mejor manera de comenzar el año -se disputa del 16 al 19 de enero– para todos los profesionales. Los campos están en la montaña, por lo que no deben preocuparse nada por el viento”, sentenció el jugador de San Diego, quien buscará a su vez revitalizar su imagen dentro del campo después de un 2019 frustrante que le ha llevado a perder siete cortes en los catorce torneos disputados con un solitario Top 40 entre ellos y a dejar su récord de estancia en el Top 50 mundial en 26 años.