Consiguió sorprender a todos con su liderato llegado el ecuador del Travelers Championship, pero un fin de semana plagado de desaciertos dio al traste con la posibilidad de ver a Phil Mickelson levantando su primer campeonato traspasado el medio siglo de edad. El genio de San Diego finalizó su actuación sobre la hierba del TPC River Highlands con dos rondas de 71 impactos -un golpe por encima del par- que lo condujeron al Top 24, a ocho golpes de Dustin Johnson. No obstante, Lefty sacó conclusiones positivas de su visita a Cromwell después de haber fallado tres cortes de manera consecutiva.
“He visto toda esta semana como un progreso”, señaló el cinco veces ganador de Majors al término de su ronda del domingo. “Está claro que el objetivo es siempre ganar torneos, pero hay que tener en cuenta de dónde vengo. He perdido un montón de cortes y hacía bastante tiempo que no había podido jugar al nivel que me hubiera gustado. Por suerte, esta semana tuve muy buenas sensaciones y hay que quedarse con eso. Pegué buenos golpes e incluso hice muy buenas salidas. Hasta los fallos fueron mejores que los de otros torneos”, argumentó el norteamericano, que ya tiene en mente su próximo objetivo.
“Esta semana es para ser optimista de cara al futuro. No creo que haya sido una actuación aislada. Es más, pienso que va a ser el comienzo de algo especial. O al menos es lo que siento. Estoy emocionado por ello y sólo hace falta refinar un poco el juego para poder volver a las primeras plazas en Ohio”, sentenció. Y es que Mickelson descansará esta semana en el Rocket Mortgage para volver a ser de la partida en el Workday Charity Open y en el Memorial, los dos eventos que se jugarán de manera consecutiva sobre la hierba de Muirfield Village a mediados del mes de julio.