Quizá, ayer, cuando encendieron la tele y se dispusieron a ver la primera jornada del KLM Open repararon en que faltaba alguien sobre la hierba de The Dutch. Efectivamente, el belga Thomas Pieters. Pese a que el jugador centroeuropeo estuvo inscrito para disputar el campeonato al lado de casa y afrontaba con optimismo su primera semana competitiva como miembro de pleno derecho del equipo europeo de la Ryder Cup, el deportista de 24 años no tuvo más remedio que ausentarse del torneo tras un problema de salud provocado ¡por la picadura de una abeja!
“Desgraciadamente, el peor de los escenarios acaba de suceder”, escribió el joven golfista en las redes sociales. “El pasado lunes sufrí una picadura de abeja durante el desafío contra Joost Luiten y ésta ha dado lugar a una reacción alérgica con grandes síntomas de gripe que me han obligado a abandonar mi torneo favorito del año”, sentenció el belga, para sorpresa de sus fans.
El joven jugador nacido en Antwerp era uno de los grandes atractivos de esta semana en Spijk. Y es que, además de por la llamada de Darren Clarke, su caché ha subido en los últimos tiempos por algunas grandes actuaciones a uno y otro lado del charco –el pasado agosto ha sido el mejor mes de toda su trayectoria profesional, consiguiendo en los tres eventos un cuarto, un segundo y un primer puesto en los Juegos Olímpicos, el Masters de la República Checa y en el Made in Denmark, respectivamente-. Unos resultados que han desencadenado finalmente su inclusión en el combinado del viejo continente para hacer frente a los Estados Unidos a finales de este mes de septiembre en Minnesota.
Una cita que, pese a este contratiempo, no se perderá por nada del mundo. Es más, en su cabeza está ya el evento de dentro de dos semanas en Alemania, el Porsche European Open, en el que tiene depositadas muchas esperanzas.