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El jugador vizcaíno sigue al acecho de un nuevo Top 10 en el PGA después de otra ronda bajo par. Foto: @PGATour
Mucho tendrían que cambiar las cosas para que no contáramos con la presencia de los dos jugadores españoles durante los últimos 36 hoyos de este Shriners Hospitals for Children Open. Uno, Jon Rahm (-8), ya la ha asegurado después de firmar otra ronda por debajo del par del campo en el turno de mañana; otro, Gonzalo Fernández-Castaño (-4), está pendiente de la reanudación del torneo para disputar el par 5 del hoyo 18 y poder decir con todas las letras que formará parte del nutrido grupo de deportistas que juegue el fin de semana sobre la hierba del TPC Summerlin de Las Vegas.
El jugador de Barrika disputará su partido en la tercera ronda, la llamada del movimiento, en uno de los últimos turnos del día después de quedarse al borde del Top 10, un resultado que podía haber sido mucho mejor si las últimas 9 banderas se hubieran portado de otra manera. Y es que el español, que llegaba al hoyo 2 –su undécima bandera del día- con dobles dígitos en negativo, tuvo que conformarse finalmente con ese ocho bajo par que campea en su marcador después de dos bogeys en el 3 y en el 9 que le dejan a seis golpes de distancia del australiano Rod Pampling (-14), quien sigue sorprendiendo a propios y extraños en el liderato.
El madrileño Gonzalo Fernández-Castaño, con su tres bajo par en la jornada gracias a cuatro birdies y a un bogey y con el hoyo 18 todavía por disputar, está muy cerca de poder superar el corte por segunda semana consecutiva –algo que no pudo decir muchas veces hace dos temporadas, cuando perdió la tarjeta del circuito-. El capitalino se asegura así otros miles de dólares más en su bolsillo y con ellos un paso más cerca de conseguir el objetivo principal, que no es otro que la renovación de los derechos del PGA para el curso 2017/2018.
