A pesar del antiguo mantra que busca no mezclar política y deporte, es inevitable mencionar ambos conceptos de forma unida al referirnos a la participación de los jugadores americanos en los eventos del European Tour que tendrán lugar durante las próximas semanas en algunos países de Oriente Medio.
Y no lo decimos sólo porque las sedes elegidas por el mejor circuito del viejo continente no sean las más idóneas si lo que tenemos en cuenta son los Derechos Humanos -algo que ya se ha tratado en más de una ocasión en los últimos tiempos-, sino también por la reciente ola de crispación vivida en Irán por culpa del asesinato perpetrado por drones estadounidenses del general Qasem Soleimani.
Una situación que ha obligado a Estados Unidos a emitir una alerta de seguridad aconsejando a que todos sus conciudadanos que vivan en Irán abandonen lo antes posible el país por temor a represalias. Asimismo, el Departamento de Estado norteamericano pidió precaución para todas aquellas personas que viajaran a Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, casualmente los países donde se disputarán el Abu Dhabi HSBC Championship, el Omega Dubai Desert Classic y el Saudi International.
Sin embargo, los Brooks Koepka -reaparecerá en Abu Dhabi la próxima semana después de la lesión producida en octubre-, Dustin Johnson, Patrick Cantlay, Patrick Reed, Bryson DeChambeau, Tony Finau y Phil Mickelson no tienen la más mínima intención de echarse atrás en los compromisos adquiridos con respecto al Tour, tal y como ha afirmado el propio European Tour este mismo martes en unas declaraciones recogidas por GolfDigest USA.
“La seguridad tanto de nuestros jugadores, del personal y de todos los involucrados en todos y cada uno de nuestros torneos en todo el mundo es nuestra principal prioridad”, comenzaba el comunicado elaborado por el circuito. “El European Tour supervisa constantemente lo que sucede en los países donde vamos, recabando los consejos de seguridad de las principales agencias. Y así continuaremos haciéndolo”, sentenciaron en el mismo. Veremos si en unos días no se tiene que dar marcha atrás como ocurrió en Hong Kong.