Entramos en la que para muchos es la semana grande de la temporada en el mundo del Golf. El Open nos da la oportunidad de disfrutar en Europa del único Major en nuestras fronteras y, por ende, de los mejores jugadores del planeta en un espectáculo que este año visitará el Royal Portrush norirlandés después de casi 70 años de ausencia. Los Brooks Koepka, Dustin Johnson, Justin Rose, Rory McIlory, Jon Rahm y compañía tratarán de sumar en sus vitrinas la Jarra de Clarete, uno de los grandes galardones de este deporte. Sin embargo, en esta cita no estarán todos los jugadores más en forma de la actualidad.
Y es que seguramente a muchos les ha sorprendido la ausencia del rookie y flamante ganador en el PGA Tour Matthew Wolff después de haberse impuesto hace apenas un par de semanas en el 3M Open, evento de nuevo cuño esta temporada en el mejor circuito del mundo -sobre todo porque el ganador del Rocket Mortgage y el del John Deere, eventos que se han disputado antes y después de que el joven norteamericano se impusiera en la cita de Minesota, sí que están-. Y podríamos decir que todo esto se debe a asuntos completamente arbitrarios.
Para hablar de ello tenemos que comentar que es la Open Qualifying Series, que no es más que un conjunto de dieciséis eventos alrededor de once países en los que se reparten 46 plazas para aquellos jugadores que no han logrado clasificarse a través de ninguna de las 28 categorías. PGA Tour, European Tour, Asian Tour, Korean Tour, PGA Tour de Australasia, Japan Tour y Sunshine Tour son las giras en las que los jugadores han tenido la ocasión de ponerse manos a la obra para clasificarse para el último Grande de la temporada. Eventos que fueron señalados antes de que arrancara el curso, de ahí que “El Lobo” supiera con antelación que su triunfo no venía con una invitación para el Open de regalo.
A pesar de que el field de esta semana en el TPC Deere Run era bastante más flojo que aquel en el que ganó Wolff, el caso es que el deportista de 20 años no viajará a las islas británicas y sí estará, por ejemplo, en el próximo Masters de Augusta. Una situación algo extraña pero que comparte, por ejemplo, el también prometedor Collin Morikawa, que terminó subcampeón en el 3M Open. Así pues, las aventuras de Matthew en los Grandes no comenzarán hasta 2020.