Lo sucedido a Eduardo de la Riva esta semana demuestra lo cruel que puede llegar a ser el deporte profesional. El catalán, jugador del Challenge Tour, se quedó fuera del reparto de tarjetas para el 2013 en el Tour Europeo por apenas 766 euros.
19 torneos jugados esta temporada, 14 cortes ganados, 64 rondas disputadas, 4.650 golpes ejecutados… y por uno de esos golpes de más, tan solo por uno de ellos (que le podría haber reportado más de 800 euros en cualquier torneo ganando una posición en la tabla) te quedas fuera de tu sueño.
Esto es algo inevitable que ocurre con infinidad de jugadores en todos los circuitos tanto para conseguir como para no perder la tarjeta, pero que vivimos de cerca cuando le toca a uno de los nuestros.
Carlos del Moral habrá revivido lo que le ocurrió en estas mismas fechas hace ahora dos temporadas también en el Challenge Tour. Aquel año, todavía reciente, el valenciano se quedaba fuera del reparto de tarjetas por 558 euros, mes y medio más tarde del Moral conquistaba la tan ansiada tarjeta en el Escuela del Tour.
Juan Antonio Bragulat fue otro de los damnificados ese año, en este caso en el Alps Tour, ‘Bragu’ fue sexto ese 2010 en el Circuito Satélite del Tour Europeo a poco más de 2.400 euros de la quinta plaza. Los cinco primeros obtenían el pasaporte para el Challenge del año siguiente.
Todo esto demuestra que también en cualquier deporte de élite ‘hasta el rabo todo es toro‘, que cada golpe, que el mínimo error en no importa que día, te puede pasar factura al final de temporada. ¿Cuántos de esos instantes se le habrá pasado por la cabeza a Eduardo de la Riva en estas últimas 24 horas?