Hacía años que Rafa Cabrera Bello (66 golpes, -11) no encadenaba dos rondas de juego tan buenas en el PGA Tour. Y es que los resultados esta vez sí que están acompañando al desgaste producido por el español sobre la hierba del TPC Deere Run, situándolo en el Top 15 en el momento que más lo necesitaba. Ahora bien, todavía queda margen de mejora y, lo que es más importante, ponerle la rúbrica a este John Deere con unos grandísimos 18 hoyos finales con los que luchar para colarse más arriba todavía.
¿Pelear por el triunfo? No seremos nosotros quienes lancemos las campanas al vuelo, pero si Rafa esperaba una semana para intentar su asalto al podio era ésta. Ahora son sólo tres los golpes que separan al miembro de la Armada de las tres primeras plazas del torneo y, viendo lo lanzado que va los dos últimos días, no sería descartable que el domingo diera otro salto de calidad en la tabla. De hecho, mucho le habrá rondado por la cabeza al isleño sus primeras horas por el complejo de Illinois, pues un papel con algún birdie más le podría haber permitido pelear por la victoria.
Centrándonos más en su vuelta del sábado, Rafa entregó una cartulina limpia de errores con cinco birdies y unas estadísticas que invitan al optimismo: más de un 71 por ciento de acierto en calles cogidas y casi un 90 en lo referido a greenes en regulación. Una ronda sin estridencias, tal y como decíamos el viernes, en la que el único pero llegó en el hoyo 8 después de no aprovechar una oportunidad clara de birdie desde un metro. Aparte de esto, Rafa vivió un día sin sobresaltos con el que se sitúa a cinco golpes de un Sebastián Muñoz (67 golpes, -16) que sigue aguantando las embestidas de sus rivales en lo más alto de la clasificación.
? A rogue yardage book.
? Munoz keeps it rolling.
? Another ace!The Takeaway from Saturday @JDClassic presented by @FedEx. pic.twitter.com/ktptufRNjB
— PGA TOUR (@PGATOUR) July 11, 2021