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El grancanario deshoja la margarita de la Ryder y solo un fantástico final le permitiría captar la atención de Bjorn.
Tenía ante él la oportunidad de reivindicarse ante Thomas Bjorn, al estilo de lo que ha conseguido hacer Matt Wallace en la última ronda del Made in Denmark. Sin embargo, la jornada del movimiento de Rafa Cabrera-Bello (69 golpes, -8) -a pesar del birdie en su primera bandera del día- no ha resultado ser tan satisfactoria como la del inglés y, salvo un vueltón el lunes, el grancanario podría haber dicho adiós a una invitación para la Ryder Cup que tiene muchas novias conforme se va acercando la decisión final.
Eso sí, ganas no le van a faltar al español para pelearla hasta el último instante. De hecho, a pesar de no haber jugado especialmente bien en sus terceros 18 hoyos este domingo -gran parte de culpa la tuvo de nuevo el putter-, Rafa ha vuelto a bajar de los 70 impactos gracias a cinco birdies y tres bogeys que le colocan en el T12, a solo un impacto de los puestos que le dan derecho a entrar en la zona noble y a cuatro de un podio que cuenta con tres nacionalidades distintas.
Y es que mientras que Tyrrell Hatton (69 golpes, -12) y Bryson DeChambeau (63 golpes, -12) -el estadounidense con la mejor vuelta del día con un extraordinario final con birdie–birdie–eagle– comparten la segunda posición del evento, el mexicano Abraham Ancer (65 golpes, -13) se ha subido a lo más alto gracias a un inicio de domingo al más alto nivel –seis birdies en los nueve primeros hoyos dan fe de ello-y peleará por sumar su primer triunfo en la gira.
Jon Rahm (70 golpes, -3), segundo y último español en la prueba, solo pudo restarle un golpe al TPC Boston y desciende seis posiciones hasta el Top 40, un puesto que le hace descender también enteros en la FedEx Cup, donde en estos momentos ocupa el 21er lugar.
