“Voy a necesitar una vuelta a lo Sebastián para darme una opción. Si no, voy a necesitar mucha suerte en todos esos posibles escenarios”; apuntó

Jon Rahm sigue en la pelea por el título individual del LIV Golf 2025 y afrontará la jornada final con la ambición intacta, aunque consciente de que necesitará rozar la perfección. El vasco firmó una gran vuelta el sábado que le permitió no descolgarse de la lucha y dejó claro que este domingo necesitará algo especial para soñar con la victoria. “Voy a necesitar una vuelta a lo Sebastián para darme una opción de ganarlo todo. Si no, voy a necesitar mucha suerte en todos esos posibles escenarios”.
“Me alegro de estar todavía en la pelea, pero aún me reprocho no haber ganado al menos una vez”
Rahm reconoció que, a pesar de no haber podido aún estrenar su casillero de triunfos este año, llegar al último día con posibilidades de defender su título es motivo de orgullo. “Me alegro de estar todavía en la pelea, pero aún me reprocho no haber ganado al menos una vez. Tuve oportunidades y no lo logré. Habrá algo que aprender de este año. Si termino segundo en solitario y Joaquín no tiene su mejor día, convertirme en campeón sin haber ganado un torneo sería algo muy especial, porque quizá no se repita nunca más”.
La batalla con Joaquín Niemann centra buena parte de su atención. El propio Rahm asume que tendrá que batir al chileno con claridad. “En mi mente tengo que esperar que Joaquín salga y, como mínimo, haga un menos cinco. Es un grandísimo jugador y este campo es muy accesible”.
Preguntado por si preferiría jugar junto a su rival directo, Rahm fue claro. “Creo que de las dos formas está bien. Si puedo empezar fuerte y meterle presión, sería positivo. Pero juegue o no con él, voy a salir ahí fuera a intentar hacer la vuelta más baja que pueda”. Finalmente Jon Rahm y Joaquín Niemann jugarán en el mismo partido con David Puig de testigo pero también en la lucha por el triunfo.
Sobre el recorrido de The Club at Chatham Hills, el de Barrika explicó que seguirá siendo propicio para los birdies. “Las calles están cada vez más firmes, así que seguirá jugándose corto. Lo único que puede complicarlo es la colocación de banderas, porque los greenes están blandos y entramos con hierros cortos. Si la pones en juego desde el tee, vas a tener muchas oportunidades. Aquí hacer tres o cuatro bajo par no es complicado, y con 50 de los mejores jugadores del mundo con wedges en las manos, hay que esperar birdies”.
Puede seguir a OpenGolf en Facebook; Twitter; LinkedIn y suscribiéndose a través de este enlace a nuestra Newsletter Semanal





