Misión más que complicada la que tendrá en la jornada del domingo el León de Barrika después de un día de puro sufrimiento en Torrey Pines. Y es que Jon Rahm (75 golpes, -7), que partía en la segunda posición a solo un impacto del liderato, vio truncado su deseo de salir en el último partido del Farmers Insurance Open después de una floja ronda que le ha hecho entregar una cartulina con tres golpes sobre par y, como consecuencia, deslizarse hasta el T12.
Y eso que su historia en la jornada del movimiento comenzó de maravilla, convirtiendo un lejano putt de más de seis metros en el hoyo 1 para colocarse líder momentáneo junto a Ryan Palmer (73 golpes, -10). Pero lamentablemente para nuestros intereses esta fue la última vez que lo vimos tan arriba en la tabla. Tres bogeys consecutivos en el 2, el 3 y el 4 le despertaron del sueño de seguir ostentando el liderato y, pese a que anotó un birdie más en el 6, empezó a percatarse de que se avecinaba un día largo y duro.
No es que sus rivales cuajaran vueltas espectaculares -con la excepción de JB Holmes, que se fue hasta los 65 golpes-, pero sí que es cierto que supieron sortear mejor las dificultades del enrevesado circuito de San Diego. En especial el sueco Alex Noren (69 golpes, -11), quien comanda el torneo en solitario después de errar solo en el 12, el hoyo más difícil del día del que el vizcaíno tampoco se escapó para volver a desnivelar la balanza en favor de los bogeys y bajarse de los dobles dígitos en negativo.
Pero cuando pensábamos que lo peor había pasado y que todavía podía salvar el día con un birdie en el par 5 del 18 llegó la debacle. Y es que a pesar de una gran salida, Rahm mandó la bola al agua en su intento de llegar de dos a green, lo que le condicionó el exceso. En su cuarto golpe, su approach se quedó a cinco metros y medio y a partir de aquí necesitó de dos intentos con el putter para ise a Casa Club con el -7 y con la sensación de que tendrá que hacer una enorme remontada si quiere aspirar a revalidar título.
El que sí que ha cuajado un buen día es Tiger (70 golpes, -3), que sigue yendo de menos a más con el paso de las horas y ya se ha conseguido meter entre los 40 primeros, una hazaña lograda con un día excelso en las inmediaciones de bandera.