Si para algo ha servido el reciente WGC-FedEx St. Jude invitational es para que las casas de apuestas ajusten las cuotas de cara al PGA Championship que arrancará en sólo unas horas sobre la hierba del TPC Harding Park de San Francisco. Y, como no podía ser de otra manera, los grandes triunfadores de la prueba disputada en Memphis parten como los caballos ganadores. Por una parte -y como es obvio- Justin Thomas, nuevo número 1 del mundo y el jugador que consiguió llevarse a casa su segundo Campeonato Mundial; por otro, Brooks Koepka, que mostró una amplia mejoría en su juego en comparación con lo visto los últimos meses.
De hecho, según Las Vegas, ambos figuran como los principales favoritos a hacerse con el triunfo pagándose diez dólares por cada dólar apostado en el caso de decantarse por cualquiera de los dos jugadores. Todo ello provocado en parte por la dosis especial de adrenalina que le dará a BK luchar por llevarse a casa el tercer PGA Championship de manera consecutiva, un hito que no ve desde que Walter Hagen lograra cuatro en la década de 1920 -hace casi un siglo-.
Pero nada está dicho sobre lo que nos va a deparar el primer y único Major de un curso que da los últimos coletazos en Estados Unidos. Es por esto que, ¿por qué no pensar que Jon Rahm podría levantar su primer Grande esta misma semana? Una situación que los expertos no descartan en absoluto, pues su victoria se cotiza a catorce dólares por dólar apostando, situándose tras JT y BK e igualando las cuotas de Rory McIlroy y Bryson DeCheambeau. Un dato que le añade más emoción a la actuación del León de Barrika esta semana, cuyo miembro de la Armada más cercano en cuanto a las cuotas es Sergio García. Una victoria la del castellonense que cotiza a ochenta dólares por dólar apostado.