¿De qué planeta viniste, Jon? Esta misma pregunta nos la hacemos todos los amantes del golf desde hace algún tiempo gracias a todo lo que está logrando el joven jugador de Barrika (Vizcaya) en sus primeros meses como profesional. Y es que en apenas cuatro torneos el deportista vasco se aseguró la tarjeta del PGA Tour con mucha suficiencia –un segundo y un tercer puesto incluido- y esta semana está demostrando en Cromwell (Connecticut) que su pegada desde el tee y su gran juego corto van a proporcionar muchísimas alegrías a la afición española.
Sin ir más lejos, Rahm (-5) ha vuelto a protagonizar uno de esos inicios fulgurantes de campeonato gracias a cinco birdies, un eagle y dos bogeys en sus primeros 18 hoyos en el Travelers Championship, tarjeta que le ha servido para colocarse en el T4 junto a jugadores de la talla de Ben Martin y Marc Leishman y a solo un golpe de Vaughn Taylor, Andrew Loupe y Jerry Kelly, actuales líderes del evento sobre la hierba del TPC River Highlands.
Pero más allá de sus números –que obviamente son fantásticos- tenemos que reparar en su juego. Rahm actúa como si fuera todo un veterano, sabiendo qué golpe es el que mejor se ajusta al campo en cada momento. Fruto de esta grandísima visión ha venido uno de los golpazos del día, cuando el vasco ha embocado directamente desde el rough en el hoyo 18 para conseguir el birdie y colocarse en ese instante líder del evento.
Finalmente no pudo mantener esa condición, pero se ha colocado en un buen lugar desde el que luchar por su primera victoria como pro. No será fácil, pues son muchos los grandes jugadores que se agolpan en las primeras posiciones, pero jugando así los triunfos no tardarán en llegar.