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El español no arranca con buen pie el torneo e irá a remolque el resto del campeonato. Foto: @PGATour
Pese a que llegaba con las expectativas muy altas en su intento de recuperar el número 1 del mundo que Dustin Johnson le arrebató la semana pasada en el TPC Boston, Jon Rahm (75 golpes, +5) ha tenido un mal día en su visita al Olympia Fields CC de Illinois. El vizcaíno, que se las prometía muy felices saliendo desde uno de los primeros encuentros de la jornada, se topó con un campo que no buscó hacer amigos en ningún momento y que le privó en muchas ocasiones de haber enderezado un rumbo que se torció desde el inicio.
Rahm, que en el transcurso del día no llegó a alcanzar el 30 por ciento de calles cogidas desde la salida, lo intentó por todos los medios desde los compases iniciales, pero hay días en los que las cosas nos salen como uno planea. Así, y a pesar de que el español tuvo una oportunidad de birdie desde unos cuatros metros en su primera bandera que podía haber cambiado el sino de la ronda, en su segundo hoyo se dio cuenta de que iba a sufrir de lo lindo al tripatear desde unos ocho metros y medio y cometer su primer bogey del día.
El León de Barrika se defendía como podía e incluso volvió a colocar el Par total en su casillero al aprovecharse del par 5 del hoyo 15 para firmar el birdie -el que a la postre sería el único en el día-. Pero fue sólo un espejismo. Y es que, a partir de aquí, Jon pasó por un auténtico vía crucis que lo llevó a cometer bogeys en el 16, 18, 5, 8 y 9 para finalizar el día con un cinco sobre par que lo aleja sobremanera de las primeras posiciones del evento, donde en estos momentos reina el japonés Hideki Matsuyama (67 golpes, -3) tras completar unos excelentes nueve últimos hoyos.
