Nuevo torneo en el horizonte en el PGA Tour, pero mismo guión que la semana pasada. Y es que Jon Rahm nos está dando razones más que de sobra para creer que el lunes podría convertirse en el segundo español en toda la historia en hacerse un hueco en lo más alto del ranking mundial -solo por detrás del inimitable Seve Ballesteros-. Para ello debería salir victorioso en el Farmers Insurance Open, renovando así el título cosechado hace justo doce meses. Y lo cierto es que a cada hora que pasa estamos más y más convencidos de que puede lograrlo.
El vizcaíno, que en la tarde noche del viernes en España se enfrentó al campo norte de Torrey Pines, volvió a dar muestras de un juego exquisito que le valió no solo ser uno de los mejores deportistas en todo el día en el complejo de San Diego, sino también para meterse segundo en solitario con dobles dígitos en negativo. El León de Barrika huyó de los fallos, demostrando que el par con sabor a birdie cosechado en el hoyo 18 del jueves puede haber tenido una importancia vital en el devenir del campeonato, logrando seis birdies colosales que le hacen coger fuerzas para los últimos 36 hoyos.
Unos números que ya se veían venir desde el comienzo del día pues, estando el español por el hoyo 8 de su vuelta, su tarjeta reflejaba un prometedor cuatro bajo par merced a cuatro birdies en el 10, 11, 14 y 17, a los que añadió dos más en el 7 y el 9 para quedarse a un solo impacto del local Ryan Palmer (67 golpes, -11), que se mantiene un día más en la zona alta, desde donde ha divisado el gran día del australiano Jason Day (64 golpes, -7), nuevo integrante del Top 6.
Por lo que respecta a Tiger (71 golpes, -1) le ha costado una barbaridad, pero la leyenda californiana estará el fin de semana luego de protagonizar una espectacular remontada. Y es que el futuro no era nada halagüeño cuando, tras su paso por la primera parte del recorrido, su cartulina reflejaba un +2 en el día después de un solitario doblebogey. Esto cambió radicalmente en la parte final y con cuatro birdies y solo un bogey -uno de los aciertos en el 18 incluido- manda un aviso a sus detractores en el primer torneo tras su regreso.