Jon Rahm, campeón en 2019 y séptimo en 20121 formando pareja junto a Ryan Palmer, fue el autor de uno de los golpes más bonitos y complicados en la segunda jornada del Zurich Classic en la pasada edición. Un golpazo desde uno de los bunkers que protegen el green del sexto hoyo del TPC Louisiana con la particularidad de que el golpe tenía añadida una dificultad, y es que mientras la bola se encontraba en la arena, el de Barrika jugaba fuera de la misma debido a la configuración del bunker. Un birdie que fue celebrado por todo lo alto tanto por Jon Rahm como por su compañero Ryan Palmer.