Ocurría en el hoyo 13 de Sawgrass, un par 3 de 160 yardas (146 metros) con el que el de Murrieta dejaba la bola dada. Un golpazo que el propio PGA Tour lo ha denominado como «Moonshot» al enviarla a las nubes con un hierro 9. Un birdie «fácil» que servía para que Rickie Fowler anotara el quinto birdie del día para quedarse a las puertas de la zona noble.
Moonshot ?@RickieFowler sticks it close @THEPLAYERSChamp. pic.twitter.com/EdEKde2dod
— PGA TOUR (@PGATOUR) March 11, 2023