Todo lo bien que había iniciado Jon Rahm su andadura en el WGC-Dell Technologies Match Play se vino abajo conforme se acumulaban los hoyos sobre la hierba del Austin CC. Y es que el español, que empezó mandando en su duelo ante Rickie Fowler desde la primera bandera -un error del norteamericano desde la salida tuvo la culpa-, no supo aprovechar las oportunidades que le brindó el complejo texano y terminó izando la bandera blanca ante un californiano que se lo creyó y acabó obteniendo premio.
Y eso a pesar de que el deportista de la Armada se colocó muy rápido con dos hoyos de ventaja. Apenas se habían disputado tres banderas y el León de Barrika parecía dar un zarpazo al envite. Sobre todo porque parecía controlar a la perfección los intentos de Fowler de meterse en el partido -algo de lo que pueden dar fe los birdies en el 5 y el 6-. Sin embargo, y a pesar de mantener la ventaja con un par en el 8, todo empezó a derrumbarse a escasos minutos de hacer el cruce.
Rahm no volvió a ganar un solo hoyo y, por el contrario, el estadounidense encontró un resquicio con sendos bogeys del vizcaíno en el 8 y el 11 que le sirvieron para elevar las tablas al casillero. A partir de aquí, Fowler asumió las riendas de la partida y convirtió tres birdies en las seis banderas finales que le dieron dos hoyos de ventaja que resultaron definitivos para situar el 2&1. Un resultado que obliga a Jon a obtener la victoria del duelo que vivirá el jueves con el también norteamericano Keith Mitchell -que rascó un empate ante Horschel– y esperar a que Rickie se vaya dejando algún triunfo por el camino.
Ver esta publicación en Instagram