Si hay algo que no debe perderse nunca a pesar de que vengan mal dadas es el sentido del humor. Y esta semana, que no ha sido especialmente fácil para Trevor Immelman -capitán del equipo internacional de la Presidents Cup– después de las numerosas ausencias a las que está teniendo que hacer frente su escuadra para la cita en Quail Hollow Club, seguro que se agradece el apoyo que le están brindando al sudafricano desde diferentes partes del mundo. El último en echarle un capote ha sido Rory McIlroy quien, en la previa del BMW PGA Championship, se ha ofrecido para jugar a sus órdenes en un campo que conoce como la palma de su mano.
“Estoy al cien por cien con Immelman en este tema. Ellos van a estar en Quail Hollow Club… ¿me habéis visto jugar allí? Me encantaría estar presente”, comentó, antes de soltar una carcajada contagiosa en la sala de prensa de Wentworth. Después de todo, es conocido mundialmente el idilio del norirlandés con este complejo, donde ha ganado hasta en tres ocasiones. Pero no crean que esto ha sido un mero chascarrillo del europeo ante los periodistas, sino que esto mismo ya lo habló con el propio Immelman hace unos días.
“Se lo he dicho muchas veces durante las últimas semanas. Trevor y yo incluso tuvimos algunas charlas recientemente debido a la ausencia de algunos jugadores que se clasificaron y finalmente no estarán. Estoy convencido de que dentro de mí tengo algún gen australiano o sudafricano”, se sinceró. Obviamente, y pese a la insistencia de Rory, esto no hubiera sido posible aunque se lo plantearan. Y es que la competición especifica que los jugadores deberán ser estadounidenses contra un equipo de no europeos. Así pues, Rory tendrá que esperar a la próxima cita del Wells Fargo para competir en su campo talismán.
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— DP World Tour (@DPWorldTour) September 7, 2022