Parecía que todo estaba prefijado para ver a Rory McIlroy subido de nuevo a lo más alto del podio en un torneo del DP World Tour. Sin embargo, el dios del golf tenía deparada otra sorpresa para el deportista norirlandés. Y es que, por si fuera poco con verlo tripatear en el 14 tras dejar la bola a poco más de medio metro desde la salida, la última bandera en el Dubai Creek Resort nos dejó uno de los momentos más vibrantes de los últimos años en el circuito europeo.
Y es que, con el número dos del planeta haciendo la salida en el 18 con un golpe por encima de Tommy Fleetwood, la tragedia sacudió al cuatro veces ganador de Majors. Rory, en su intento por apurar la calle para contar con un mejor ángulo de entrada a green, se dio de bruces con el obstáculo de agua. Una sensación que ya había experimentado el viernes en la octava bandera, pero por aquel entonces todavía contaba con margen de reacción. No fue así en el hoyo 72 del campeonato, de donde salió con un bogey que le abrió de par en par la puerta a un Fleetwood que no desaprovechó el regalo.
“Es la primera semana del año, creo que es normal que se den algunos de estos errores. Desafortunadamente para mí, estos aparecieron en los últimos instantes”, comentaba el propio Rory tras finalizar su ronda, quitándole hierro a la parte final del Dubai Invitational. De hecho, la decepción de McIlroy no se tradujo en caras largas en el último green. Al contrario, se fundió en un gran abrazo con el inglés, a quien le une una amistad que se remonta en el tiempo.
“Ha sido fantástico jugar junto a Rory, uno de los mejores jugadores del planeta. Estoy muy feliz ahora mismo. Esta sensación, aunque no la experimento tanto como me gustaría, es genial”, sentenció el británico.
Drama at the 72nd hole! ?@McIlroyRory finds water down the last. #DubaiInvitational pic.twitter.com/zWpfowFFKH
— DP World Tour (@DPWorldTour) January 14, 2024
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